La Selección Colombia cerró las Eliminatorias con la frente en alto y un show digno de carnaval. En Maturín no hubo drama, hubo goleada con sello samario: Luis Javier Suárez se inventó una noche histórica con cuatro pepazos que ya están tatuados en la memoria cafetera.
El susto inicial
Venezuela arrancó picante y al minuto 3 ya celebraba gracias a Segovia. El Monumental temblaba y más de un colombiano se agarraba la cabeza pensando: “¿otra vez vamos a sufrir?”. Pero tranquilos, que la película cambió de género.
El cabezazo que calmó los nervios en Colombia
James levantó la pelota desde el tiro de esquina y Yerry Mina, como en sus mejores tiempos, la mandó a guardar de cabeza. Un respiro… pero apenas duró un suspiro, porque Josef Martínez volvió a adelantar a la Vinotinto tras un errorcito de Mier que ni él se explica.
El inicio del show Suárez
Cuando la cosa se veía enredada, apareció la dupla caribeña: pase de Lucho Díaz, toque sutil y definición letal de Luis Suárez. Empate y comienzo de una fiesta que nadie esperaba.
En el segundo tiempo Colombia salió con hambre y Suárez se convirtió en chef. Minuto 49, minuto 59 y minuto 67… hat-trick y póker en menos de veinte minutos. ¡Ya parecía videojuego en modo principiante!
Y ojo al dato; es el primer colombiano en meter cuatro goles en un mismo partido de Eliminatorias. Récord con apellido repetido, porque el último en hacerlo fue Luis Suárez… el uruguayo. Ironías del destino.

El cierre con sello tricolor
Rondón descontó para Venezuela, pero Colombia tenía más gasolina. Juanfer y Córdoba entraron fresquitos y sellaron el 6-3. Los de Lorenzo terminaron terceros de la tabla, empatados en puntos con Uruguay y Brasil. ¿Quién lo diría?
En la tribuna
Los venezolanos no sabían si llorar o aplaudir. En Colombia, cada gol de Suárez se gritó con eco de barrio… vecinos en la ventana, perros ladrando y hasta las ollas en la cocina temblando del festejo.
Colombia en modo fiesta
Luis Javier Suárez ya no es “el otro Luis Suárez”, ahora es el que puso su apellido en la historia de la Selección Colombia. Con cuatro goles en una misma noche se convirtió en el primero en lograrlo con la Tricolor, y encima lo hizo en Maturín, un lugar donde siempre nos había costado celebrar.

De paso, Colombia cerró las Eliminatorias con broche de oro. Tercera en la tabla, con números que ilusionan y una confianza que no se compra en la tienda. ¿Será este el punto de partida para soñar en grande en el Mundial? Los leo en los comentarios… pero con respeto, tranqui que aquí festejamos récords de verdad, no cuentos de VAR.